Wolverine Inmortal

Wolverine Inmortal es una película  perteneciente a la saga X-Men que supone el segundo spin-off de Wolverine tras X-Men Orígenes: Wolverine. Está protagonizada por Hugh Jackman y dirigida por James Mangold. 

Logan (Hugh Jackman) sigue de retiro de la civilización hasta que se topa en su camino con la posibilidad de dar el último adiós a un viejo amigo. Será entonces cuando se embarque en un viaje a lo desconocido rumbo a Japón. Pero al llegar allí descubrirá que los motivos de su reencuentro son completamente diferentes, y se verá inmerso en medio de una disputa por el poder y la herencia de una gran familia. La hija del venerable anciano que conoció hace mucho tiempo se encuentra en peligro, y él hará todo lo posible para protegerla de los yakuzza y su séquito de peligrosos samuráis que les perseguirán por todo el país.

Luego del desastre titulado X-Men Orígenes: Wolverine (2009), la franquicia vuelve a insistir en con otra cinta del personaje más popular de la saga; sin embargo este no ha tenido suerte con sus películas en solitario; ya que esta producción resulto una más del montón del universo Marvel.

Basándose en una historia interesante y con mucha tela que contar durante el retorno de Logan al país asiático. La cinta inicia de manera brillante y coherente ambientando una guerra y dando una pincelada que promete ser grande, pero eso es solamente el inicio; ya que la película tiende a bajar su calidad narrativa cayendo en un contexto plano y repetitivo sin una evolución clara de los personajes y una descripción inteligente del argumento; Wolverine Inmortal se va por lo fácil repitiendo las mismas formulas veraniegas de acción superhéroe en donde no hay motivo para utilizar las neuronas; ya que todo está claro y resulta sumamente predecible. 

Respecto a las actuaciones la cinta no tiene nada que mostrar ni aportar; se limita a mostrar una serie de actores que sobreactúan y no acompañan a Hugh Jackman durante el desarrollo de las acciones dentro del filme.

El resultado es una mala fórmula aplicada que tiende a aburrir y no ofrece ninguna novedad fílmica más que recurrentes acciones típicas del genero en donde se sabe lo que pasa desde el inicio hasta fin; lo decepcionante es que lo más atractivo fue las acciones post-créditos que sirven de puente para la próxima entrega de la gran franquicia, la cual esperemos que sea una reivindicación de la saga.  

Puntuación 4/10