Julie and Julia

Bajo la dirección y adaptación de Nora Ephron, nos llega Julie and Julia basado en dos historias reales. Julia Childs fue una chef americana que introdujo la cuisine francesa en su país en los años 50 y terminó teniendo programa propio en televisión. Julie es una escritora que decidió recuperar el legado de Childs y plasmar en un blog la aventura de preparar más de quinientas recetas en un año exacto. Al mismo tiempo, Powell es la autora del libro en que se basa la película, es mitad biopic y mitad autobiografía.

En la cinta escasa la comedia como tal, solo se hace el intento con el talento de Meryl, mientras que el drama a penas se hace presente en una que otra escena a cargo de Amy. Por un lado destaca lo acertado del film con las dos grandes figuras de la actuación; las cuales hicieron una excelente dupla en Dudas y con esta se pretendió repetir el éxito histriónicos de ambas actrices. La película ha generado opiniones encontradas, unos afirman que ha sido el mejor trabajo de Meryl; mientras que otros califican como lo peor que ha hecho la directora.

El film puede calificarse como un altibajo; es decir de momentos. Ya que tiende a entretener, enganchar y convencer, pero al rato tiende a bajar y hasta aburrir; para luego volver a interesar y después baja la intensidad y así sucesivamente, con un final poco satisfactorio. Tornándose en un ciclo pero con la peculiaridad de no parecer monótono ni perder el objetivo fundamental.

Quizás peca por marcar una gran diferencia entre las vidas de ambas mujeres; al punto que pareciera dos películas con poco en común; sin embargo no deja de convencer en todo su metraje; por un lado Julia en la novelesca Paris de la década de los cuarenta, muy bien ambientada con una tonalidad que resalta el romanticismo de la época; llegando hacer que te la creas toda. Por otro Julie en la decadente New York del siglo XXI, viviendo en los suburbios de Queens, llegando a trasmitir sin complicación alguna, el estrés, la ansiedad, frustración, al lado del esposo ideal. Ambos ambientes perfectamente acabados y dirigidos.

Meryl realizo una interpretación gestual bastante aproximada, histriónicamente perfecta; sin embargo en mi opinión muy particular llegue a percibir una leve exageración para forzar la personificación de Julia; pese a lo expuesto anteriormente califico dicha actuación como digna de nominación al Globo de oro y Oscar. AMY, la joven actriz estuvo en mayúsculas, puede hacer con facilidad que te la creas sin imponer algún criterio actoral, fue una trabajo perfecto pudo comunicar la sutileza, frustración, y el repaso por los diversos estados de ánimos experimentados, sencilla, digna del reconocimiento de la academia; es de sentir el olvido de los Globos de oro. El resto del reparto bastante aceptable y sin improvisaciones.

Sin mucho que aportar, esta cinta apenas será recordada por la gestualidad y acentuación de Meryl, quien quita y le de el Oscar que espera desde 1985.

Puntuación 5/10