Gran Torino

Unos meses después del estreno de Sustituto (Changeling), Clint Eastwood presenta "Gran Torino", que además de ser su trigésima película como director, supone el final de su carrera a nivel interpretativo, según sus propias palabras. Este afamado cineasta fiel exponente del cine tradicional y alumno del mismísimo Francis Coppola anuncio su retiro con esta película.

Me parece algo irónico las vueltas que da la vida, pues precisamente antes no calificaba como excelentes los trabajos de este director pero luego de río místico cambie totalmente de parecer, pues he visto a un Clint diferente muy cuidadoso con sus películas, desde el guión hasta los elementos y circunstancias perfectamente trabajados.

En ella, Eastwood da vida a Walt Kowalski, un veterano de la guerra de Corea que descubre que su vecino adolescente de origen asiático intenta robarle su tesoro más preciado, un Gran Torino de 1972. A partir de aquí comienza una relación con el chico, que le hará intentar amoldarse a un mundo cambiante, y se verá forzado por sus vecinos inmigrantes a enfrentarse a sus propios prejuicios. El ex-soldado encarnado por Eastwood, que rehúsa abandonar su casa situada en un pueblo que paulatinamente se ha ido convirtiendo en un gueto de coreanos, se engloban las características que se reflejan en una población timorata y débil, en especial tras un 11-S que no acaba de cicatrizar. Desprecia a sus vecinos y no quiere tener nada que ver con ellos hasta que se ve obligado a ello, y cuando eso ocurre, lo hace de mala gana durante buena parte del tiempo.Obviamente, todo ello conlleva a un mensaje de evolución personal e interpersonal nada innovador, aunque a fin de cuentas eso es lo de menos. Lo que sí molesta algo más es que no haya absolutamente nada imprevisible en el film, limitándose a una continua sucesión de confirmaciones de lo que el espectador ya sabe demasiados minutos antes.


En esta película Clint pasa de ser un viejo vecino amargado, solo, temido y olvidado al héroe al mismísimo Jesucristo sacrificándose por el bien de una familia Asiática. La película nos deja una enorme y bella reflexión sobre lo que es la vida y como las ironías nos hace cambiar de parecer, al igual que a mi persona referente al director en cuestión. Característico de Eastwood pues trata lo tradicional actual, en este caso las familias y los vecindarios Norteamericanos, con la discriminación a los inmigrantes y sus pandillas callejeras. En fin no es uno de los mejores pero esta bien hecho, claro con algunas imperfecciones, artistas de bajo presupuesto y un guion no muy bueno.

Este film es bastante sencillo y gusta mucho al público a tal punto que hace llorar.

Puntuación 6.5/10.



Comentarios

Unknown ha dicho que…
BUENA PELICULA, NOS ENSEÑA Q PODEMOS CAMBIAR NUESTRA MANERA D SER Y PENSAR, NOS DEJA UN MENSAJE MUY BUENO Y ACEPTABLE, AYUDAR A ALGUIEN CUANDO LO NECESITE NUNK ESTRA D MAS, HAY Q DEJAR DE SER DISCRIMINADORES...
Unknown ha dicho que…
Si estoy totalmente de acuerdo con usted joshua.Y ME GUSTO SU INTERPRETACION NO DISCRIMINEMOS MAS SEA COMO SEA.

Entradas populares de este blog

La profesia del no nacido

CABALLEROSCURO AWARD 2010

Líbranos del Mal